domingo, 12 de septiembre de 2010

Nueva etapa in progress

Como adelanté al anunciar el carpetazo inevitable al que, por decirlo de algún modo, me llevaban las cosas, este blog pasa a ser "privado", lo que quiere decir apenas que será accesible a quienes manifiesten interés en ello de manera explícita.

No obstante, el cambio no se reduce a eso. Sin eliminar todas las entradas en su formato original, muchos de los artículos serán agrupados en orden en forma de páginas, las cuales aparecerán listadas en la solapa justo debajo de la cabecera. En breve estas páginas podrán descargarse en formato PDF para su reproducción con vistas a una lectura más cómoda.

Una de las ideas que están detrás de esto es la que señalaba en el mencionado post: sólo seremos oídos por quienes quieran oír... y yo nunca conseguiré que me oiga casi nadie... Mis propias tesis se autoconfirman en esta conclusión y debo ser coherente. Y es que no sólo no pretendo sino que rechazo la idea del reclutamiento de amigos, amores, compañeros doctos, compañeros de ruta, compañeros de complot y, por fin, de seguidores necesariamente ilusionados y engañados... Es más, no puedo evitar dejar caer sobre ello una mirada inevitablemente irónica, llena de pena por la resistencia humana hacia la autoconciencia de su propia futilidad cualquiera sea la cosa que el individuo reflexivo intente.

Por otra parte, los cambios coinciden con algunos proyectos que he comenzado a poner en marcha, entre ellos la publicación de una colección de cuentos (la mayoría dados ya a conocer aunque revisados para esta edición) y mi novela, igualmente revisada, y que fue la determinante en muchos aspectos de que construyera este blog.

En todo caso, mantendré abierto de manera pública mi otro blog Una botella llena de luciérnagas como complemento al desarrollo de mi narrativa discursiva y de ficción, en las que me seguiré desgastando al menos por ahora, tal vez inercialmente, tal vez por un extraño instinto que reconozco en mí y que no es capaz de desperdiciar lo que produce, lo que obtiene o lo que colecciona...

¡Nada, pues, de lo que no se deba hacer mucho más que reír!