En otras palabras, que todo me permite afirmar que lo único que a fin de cuentas ha cambiado es... la escenografía, el paisaje que el crimen de "bajo coste" cambió para que la misma tragicomedia simplemente continuará con escenas apenas influidas por el hecho.
En ese sentido, no se puede decir sino que ha sido una muerte extremadamente inútil. Aunque, claro, eso en el caso de que hubiese sido el objetivo de alguien que significase mucho más... Como seguramente habré provocado desconcierto, entraré en los detalles que entiendo arrojan luz, para lo cual aprovecharé un texto que ayer dejara en otro sitio con algunas actualizaciones y añadidos pero con la misma perspectiva y pronóstico.
Empezaba y empiezo por situar el asesinato en sí mismo señalando algo que ha sido visto por otros aunque con una óptica e intencionalidad diferente: su bajo coste operativo, algo que yo creo que tiene significación, aunque no en el sentido de que ETA no deseaba hacer una demostración de envergadura. Todo lo contrario, lo buscaba. Sin embargo, ¿para qué gastar más cuando el propio marco en el que se realizaría le daría, como se ha visto, la envergadura que los terroristas pretendían?
Y eso, sin lugar a duda, lo han conseguido. Lo han conseguido a cambio de una pobre vida inocente muy fácil de aniquilar. Una vida que, sin embargo, era culpable, aunque no de la más mínima afrenta a los asesinos, claro, sino de militar en el engaño y en el autoengaño, por lo cual ha sido víctima en realidad de quienes lo convencieron de que no corría peligro, de que militaba en el partido que aseguraba la paz. NO de haber hecho daño o afectado a la organización que lo condenó a muerte como se condena a un chivo o al cordero que se ofrendaba a los dioses. NO, sino de un culpable menor de una militancia política organizada que respondiendo a una estrategia de derribo y acorralamiento de la oposición (es decir, de derribo de la poca democracia formal que representa el bipartidismo, ¡vaya plena democracia!) se creyó la promesa de su líder de que estaría a salvo gracias a una negociación rastrera y esotérica que sentía menos que cero por la vida de los ciudadanos que decía representar (a los demás ya les manifestaba su odio de grupo que sigue en pie de guerra más allá de las palabras), no sólo hasta el límite de su existencia propiamente dicha, como se ha demostrado durante "el proceso" con la suya 6 veces), sino en todos los aspectos de la vida, como se estaba poniendo al descubierto con la crisis económica o la sequía, los desbordes de la inmigración, los resultados de la política exterior de pacotilla, también rastrera, también llena de concesiones a las peores formas de la esclavitud y el desconcierto antidemocrático más elemental. Un culpable de indolencia y adocenamiento que sin imaginarse que estaba siendo preparado para martir potencial acabó sirviendo también de esa manera, como mártir, por designio de ETA y para uso de ZP (la elección fue en ese sentido certera: cómo dejar un mártir al PP en estas circunstancias, en todo caso, mejor a los otros... al amigo de regímenes como el cubano o el bolivariano, como el de Siria o el de Irán... Un "líder" que, como bien observó alguien en su blog (no lo recuerdo ahora) abandona de inmediato el mitin (sin siquiera comunicar el suceso que afectaba ¡a un militante!, ni pedir siquiera un minuto de silencio) con la "urgencia" de quien encuentra una salida. Y esto queda doblemente refrendado fotogénica y retóricamente como puede verse en la primera página del ABC de hoy, que recoge las palabras con las que ZP contesta a la noticia dada al oído por Chaves: "Bueno, vale (!!)... Vámonos ya".
ETA lo ha conseguido pues con el coste operativo necesario, el justo, el menor... Desde este mediodía, toda la campaña, onerosa hasta límites insospechados y más en tiempos de crisis, hipócrita hasta la médula, con su simulacro de debates, libros blancos en blanco, palabras huecas que vuelven una y otra vez a escudarse en falsas interpretaciones del pasado y futuribles imposibles de cumplir (sobretodo a causa de los actores y de la dinámica que pronto, tras las elecciones, comenzará a tener lugar de manera descarnada),repito, toda la campaña electoral se ha diluido. Ni siquiera queda un mínimo resquicio para para hablar de "economía" e "inmigración", ni para que se discutan horquillas y encuestas, ni para que se piense si Rosa Diez, Ciudadans, o IU le quitarán votos a alguien. No, ahora, por fin, sólo se habla de ETA, y sólo puede haber lugar a una segunda vuelta sin primera, es decir, a una aún más clara que antes diyuntiva bipolar. O esa parece la jugada, eso parece lo deseado por ZP y sin duda lo más ventajoso (y a lo que el PP se ha plegado de nuevo, tal vez porque el PP sigue atrapado, sigue sin poder hacer "otra cosa").
Incluso, curiosidad adicional si se quiere, ¡algo que iría claramente en contra de la abstención propugnada por el separatismo terrorista vasco!, dicho sea de paso sin que para ello haya una buena explicación que no sea un tanto... conspirativa.
Por último, lo que tampoco ha cambiado ni un ápice a pesar del simulacro (y de la ingenuidad, hay que volver a decirlo, encarnada en el PP), es, obviamente, la estrategia de la cúpula del PZOE, lo que se ve a las claras tanto en la victoria del Plan Z de hacer marchar al PP a su saga , como volviendo a utilizar la jugada para ponerlo en evidencia en el tramposo sentido de que es el PP el que continua intentando mantenerse contra todos, como en la jugada rastrera de Paxi López en el funeral. Una estrategia y un Plan que nunca han sido abandonados ni lo serán pase lo que pase en las urnas, como no puedo sino prever.
Así y todo, no estoy tan seguro como Kantor (por ejemplo) acerca de que esto beneficie al PZOE ni creo que haya sido pergeñado por ETA para ello. Las dos cúspides de los "grandes partidos nacionales" se han movido muy rápido y ambos están usando todos sus recursos, en parte contradictoriamente, un poco dando palos de ciego, pero sin duda poniendo todo, cabeza, corazón, fuerza y talante, para, como ETA, llevar el ascua a su sardina.
ETA gana en propaganda, y por supuesto en el mantenimiento de su modus vivendi literalmente hablando. No nos engañemos, el circo que se ha montado desde el mediodía en lugar del que rodaba antes, es también a beneficio de los auténticos contendientes con posibilidades. Habrá gente que se deje llevar, pero... no sé... quién sabe... Lo mismo la realidad cocinaba en sus entrañas una auténtica sorpresa (incluso más allá del resultado)... Lo mismo Rosa Díez resulta que le quita muchos más votos de lo que se pensaba al César... En fin, al inicio del largo día que nos llevará a una noche más o menos tenebrosa llena de peligros, imaginando la confusión de las masas (es decir, de los que no responden directamente a consignas, smss y demás fuegos de artificio), cierro estas mías (reflexiones) con el pesimismo de siempre, como si tuviera algún peso, como si sirviera para algo, que sé que no es así, y tan sólo respondiendo a mi necesidad de trasmitirlo.
Un saludo para los que perseveran con buenas intenciones, para los ingenuos que marchan, para los ingenuos que han caído y que seguirán cayendo sin sentido.
7 comentarios:
Yo lo que me pregunto es si vale la pena votar ya si quiera, por muchas terceras vías que se hayan abierto. Algo de ilusión recuperé, pero una vez más vuelvo al desaliento de siempre: ahora mismo me debato entre lo que haré mañana. Y no es por la cuestión de ETA no... es la condena a permanecer sentado en ese banco en la plaza pública, viendo pasar a las gentes, hablar y decir... tonterías.
Estoy harto de políticos, terrorismo y demás patrañas ya cansinas (y quién no), ojala pudiese vivir uno en paz en la anarquía del uno. Pero no, es que la libertad no existe.
Y encima, la poca que hay, es arrebatada arbitraiamente por unos sádicos.
Se seguirán haciendo las cosas mal, desde el lado de los "sensatos", y los sádicos, son sádicos de nacimiento, incurables. Pero los "políticos" o pecan de estupidez o pecan de avaricia. Avaricia de votos, que es representada por la estupidez de las gentes, una vez más.
En fín, mañana (es decir, hoy), comienza el show. Y la desapetencia y zozobra se cierne sobre las cabezas de algunos, del aburrimiento del ritual que cada cuatro años se sucede. A espectar, se ha dicho, se levanta el telón, empieza el show... que papel hemos de jugar en él, esa es la verdadera cuestión de fondo, si es que hemos de jugar alguno.
Lo que no harán unos lo harán los demás. Tengo grandes dudas acerca de la influencia contemporánea del individuo, el grado en que se trata de gotas en el océano que de todos modos responden a la necesidad. Si sentimos que la realidad nos llama a la acción, entiendo que será por algo. Si lo notamos es porque también lo notan los demás. La mayoría se comportará en nombre de ese sentimiento. Si nos sumamos, estará bien. Si no (debido a algo que sentimos "inadecuado") no pasará nada: para eso están los demás, los responden directamente al impulso. En fin, no es sencillo optar por una "conducta óptima" que no existirá nunca.
Dos apuntes antes de pasar página hasta nuevo aviso, susto o indignación: (1) sin duda me dejé llevar por la intuición alimentada por el entorno próximo (Madrid) y la "sorpresa" que auguraba sólo se vio refrendada en Madrid, (2) señalé una aparente contradicción entre la convocatoria de ETA a la abstención (aparentemente contraria a los intereses del PZOE) y su asesinato que me inclinaba por interpretar como una ayudita al PZOE, pues bien, un comentario periodístico me dio ayer una buena clave para unir ambas cosas: la jugada de ETA sirvió para teñir de etarra toda abstención y la "unidad" contra ETA liderada gracias al asesinato de "un socialista" por ZP y el impresentable López. En fin, una obra maestra del maquiavelismo que ya veremos hasta dónde será capaz de llegar y hasta dónde seremos capaces de aguantar en uno u otro sentido sin caer en la depresión o tener que buscar horizontes más adecuados para la reflexión y la trasmisión de ideas.
Hay muchas conjeturas respecto a las corridas de votos de un lado a otro, que sí el PSOE ha conseguido votos abstencionistas y de la izquierda radical y los ha perdido por el centro. Que si el PP se ha hecho con el voto de los indecisos... Que si ETA ha conseguido que los abstencionistas apoyaran a Z.
No importa demasiado: España sigue siendo "roja" donde "ha" de serlo: Al-Andalus. Es ahí donde se deciden todas las elecciones generales (y en Cataluña, aunque en menor grado). Mientras se siga manteniendo el aparato burocrático-caziquista andaluz a costa de subvenciones europeas e impuestos al resto de país, no habrá "cambio". Los borregos nacen con el voto casido al pecho, pero ciertas políticas putrefactas sólo hacen que reforzarlo. Lo que marca quien gobierna en éste país es el abstencionismo, pero de un sólo signo: de "izquierdas".
Mientras tanto algunos seguirán viendo fantasmas por todos lados e inmiscuyendose en guerras ideológicas fútiles (derecha conservadora), imposibles de ganar. En un país marcado por una dictadura de derechas el populacho es muy reaccionario respecto de la misma, igual que en un país marcado por el recuerdo de una dictadura de izquierdas pasa exactamente lo opuesto (Polonia). Tan sólo cabe esperar que la progresiva retirada de la economía parasitaria tenga algún efecto positivo, porque no nos engañemos: ya sabemos lo que la mayoría de la gente es, animales adaptativos, y en cuanto a uno le tocan el sustento, ya no hay ideología que valga. Aunque ciertamente muchos años de manipulación y labado de cerebro pueden ser dañinos, la globalización acabará arrasando con todo, es imparable.
Inserto aquí mi propio comentario dejado en el blog de Paco Beltrán a cuento de su propuesta de "sentido común" anglosajón (http://usafari.blogspot.com/2008/
03/loathing-counterfactuals.html). De esta forma, me reservo la posibilidad de poder ampliar esta diatriba en un post con más detalle que el que sugiero aquí que se puede aportar sin hacerlo y hago de esto una conveniente apliación de mi propio post de "reflexión" original. Ahí va:
Estimado Paco:
Estuve dudando acerca de hacer comentario alguno, breve o largo, en contra de tu "reflexión", y por fin me rendí al impulso de explicitar mi incomprención ante un enfoque (el tuyo en este post) que carga las tintas en lo que considero aspectos en todo caso secundarios de la situación signada por el proceso que se puso en marcha (mira bien las palabras que uso con el máximo de rigor posible y en absoluto al azar) el 11-M con exactitud, que pasó por la legislatura anti-PP y pro-PRI-Z-A ahora "superada", las elecciones y debates bipolares, el asesinato oportuno y el resultado final. No voy a discutir si la sociedad española tiene partidos políticos anglosajones o latinos, ni sobre la idiosincracia del pueblo, de sus dirigentes o si la España profunda sigue prevaleciendo sobre la civilización de las grandes ciudades o si es mejor la naturaleza de los pequeños pueblos al salvajismo consumista de la capital... y mil cosas más de índole sociológica que no vienen a cuento, que tal vez sean incluso interesantísimas, sobre las que incluso podrías tener buenas opiniones y sobre las que quizá ni siquiera estés hablando. No se trata de eso. De lo que creo que se trata es de NO desviar la atención de los problemas capitales. De NO sumarse ni mínimamente a la estrategia de la condescendencia de la "buena fe" (o del "talante"). Se trata, desde mi punto de vista, y ahora incluso más que antes, ahora como no se hizo antes (al margen de insultos infantiles y contrataques pueriles que no iban ni mínimamente a la raíz del problema), como NO podía sin duda hacer un partido político como el PP ni ninguno de todos (es decir, todos) los que usufructúan esta partidocracia gobernante, de HACER, al menos desde aquellos individuos NO comprometidos, lo contrario de la pusilanimidad, de la falta de coraje, de la petición de buenos modales y de tantas cosas que, de nuevo, al margen de que sean o no recomendables y deseables (sobretodo para algún banquete de sociedad que no es el de la lucha política), SON: primero: secundarios, y, segundo: objeto de explicación como parte inseparable del análisis del proceso en su conjunto.
Para no extenderme demasiado pero para no dejar esto en una caja esotérica a ser abierta por tí o quien sea para ser develada del todo (es decir, temiéndome que no sea cierto eso de "a buen entendedor..."), resumo lo que quiero decir "en pocas palabras": la crispación, la impotencia que produce insultos, las encerronas que producen impotencia, todas las reacciones en fin que hemos visto en la gente (no en la cúpula de los partidos cuya conducta tiene otros parámetros) deben entenderse como parte de una estrategia que no sólo NO debemos suavizar ni invitar a que sea distraída u olvidada en nombre de utópicas "buenas maneras" conducentes al buen entendimiento "contra el terror" (lo que llamas al pie "common sense") o contra cualquier otra cosa que se agite como "enemigo principal" con fines estratégicos maquiavélicos (que eso son!) Debemos intentar dilucidar la raíz, lo que hay detrás, la verdadera intencionalidad. Justo lo que no se ha hecho por debilidad e interés e incluso por cobardía o ceguera. Lo suyo sería desarrollar esto punto por punto, y me declaro dispuesto y abierto, como siempre. Pero pienso que cada uno tiene, si quiere, posibilidades de reflexionar por sí mismo y de romper con posturas que, por más bienintencionadas que parezcan pueden acabar avergonzando tanto como debieron avergonzarse muchos grandes personajes históricos ante circunstancias aparentemente inocuoas o "merecedoras de comprensión".
Un saludo afectuoso y sinceramente dolorido ante las circunstancias que llevamos viviendo en este mundo.
Nacho:
Mi interés se centra en la búsqueda del rigor argumental. De ahí que rechace metodológicamente cuando se mezcla todo, sin darle el peso específico a cada cosa en su espacio específico. En general. Esto se refleja luego en confusión e incluso en confusionismo. Creo que eso es también explicable, pero eso es otro asunto.
El rigor de todos modos no excluye la narración ni las metáforas, lo que no quiere decir es que se encuentren siempre las más felices.
Un ejemplo, Strauss. Otro, Platón, por ejemplo en la alegoría de la caverna (libro 7 de República) y lo que viene después. Por ejemplo, cuál es la interpretación adecuada (es decir, llegar a saber lo que de verdad quiso decir Platón y no lo que nos conviene, etc.) con su apelación a las matemáticas o con su convicción de que "el bien" (como lo llama) está y debe estar vinculado a "la guerra"?
¡Todo es muy difícil, pero no lo dificultemos!
Perdón, me quedé a mitad de camino:
¡... no lo dificultemos con simplificaciones!
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